Desde México, CHRIST OF OBLIVION

Hay grupos que desde mi (poca) experiencia con la música en directo me transmiten de forma sutil cual ha sido parte del proceso de composición de las canciones, con esto me refiero no a la forma de componer de cada grupo, pero sí al proceso en el cual las canciones se van transformando hasta convertirse en lo que finalmente escuchamos. Justamente esto me acaba de pasar al escuchar a los mexicanos CHRIST OF OBLIVION y su disco “To Honor Lucifer”. En una primera escucha tengo que decir que a mi parecer puede que sea un grupo pensado más para directo que estudio, por sus composiciones que invitan a “liarla” como espectador, especialmente por las líneas de guitarra y bajo. Por otro lado tengo que decir, que la batería pese a ser marcada en su mayoría, en la parte de los blast-beat parece hecha por un robot en ciertas partes, le faltaban ser mas “orgánica” según a lo que estoy acostumbrado a escuchar.

En cuanto a la voz, la técnica de growls es correcta para un disco, pero como dije antes, seguramente en directo impresione mucho más. Eso sí, también entiendo que en cierto modo puedo ponerme “elitista” en cuanto a este tipo de sonidos. Por otro lado, tengo que dar mi apoyo total al uso de samples, los cuales se encuentran prácticamente en la mitad de las canciones y que introducen las mismas. Siempre es algo que es fácil de introducir y puede quedar muy bien, como es el caso.

El estilo por el cual prefieren etiquetarse es black-death metal, aunque debo reconocer que en algunas partes las líneas tiran más a un estilo death n’ roll, algo que he visto en el tercer corte de este disco. En cierto modo me recuerdan a los suecos Tribulation.

La portada de este disco fue diseñada por el cantante (Ismael) en el cual vemos a una modelo cuyo nombre es Aline Piques, de origen brasileño. La fecha del lanzamiento en CD formato jewel-case fue en marzo de este 2020. De momento no hay sello que lo edite, puesto que aún son independientes.

 

 

 

SETLIST Y DESGLOSE

Ceremony ov confusion:

Como dije antes, existe un uso de samples, cosa que aprecio mucho. Los blast-beat combinan con partes mas lentas, incluso acercándose al sludge en cuanto a riffs, las partes rapidas guardan cierto parecido a Unleashed. Muy divertido de escuchar por las lineas de guitarra, incluso en el interludio me vi haciendo headbanging en casa. La final “trashera” me dió ganas de meterme en un pogo.

Goat’s degeneration:

Aquí fe cuando me di cuenta de que este grupo en directo puede dar mucho juego, por como entraba y los riffs, junto a la batería que iba a toda pastilla. En torno a la mitad de la cancion hay una bajada de ritmo con arpeggios y parte palm-muteada muy machacona que da mucho juego.

Whorerusalem:

Ésta es la que me recordó al estilo death n’ roll como dije antes, por su estilo “sureño”-alternativo al inicio, algo que personalmente me gusta mucho, puesto que las partes marcadas de silencio, con solo el bajo son una de mis debilidades musicales, el drive del bajo es un continuo que potencia notablemente su presencia, cosa que agradezco y me gustaría ver más en los grupos de este estilo.

In lust we trust:

Trasher desde el inicio hasta el fin, invita a cicle pit durante todo el tema por su velocidad.

Purified by fire:

Buena intro, las partes lentas que se aproximan al stoner me vuelven loco, la cual obviamente cambio a más death, aunque en este corte hay algunos riffs mas tirando al black. Buena armonización de solos, parece que las guitarras hablasen entre ellas.

Faith’s placebo:

Si la intro de antes me gustaba, esta más, porque ya empieza a romper desde la misma. Partes de tapping, algo a remarcar porque al menos yo no lo esperaba, buen ritmo para hacer el solo. Mi pregunta en esta canción es, lo que se oye al final: ¿es eso francés?

We will meet again:

En este caso, como broche del disco me parece correcto porque en cierto modo reúne los elementos de todo el disco, además de ser el tema más largo, no por otra cosa sino porque contiene una hidden track, de la cual no voy a decir nada para que el que me lee se anime a escucharlos, pero sí diré que el ritmo final se me quedó en la cabeza por un par de horas. El tema inicial contiene todo lo que podríamos definir como el sonido que ha querido el grupo tener para este disco: partes mas alternativas, blast-beat en algunas partes, intro sampleada, disonancias (cosa normal en estos estilos cromáticos, junto a jugar con el hecho de usar dos guitarras), sin olvidar las artes machanconas y los solos. Finalmente, no puedo cerrar esta crítica sin volver a referenciar ESE BAJO que suena al final. Por favor, mas bajos con drive. Gracias.

 

CHRIST OF OBLIVION SON:

Ismael “El Cale” (Voz, Guitarra)

Angelo Dimartino (Bajo)

Atero García (Guitarra)

Jack Hanma (Batería)

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