“No sabía que existieran pecados de hombres y pecados de mujeres.”- Estas fueron las palabras que nuestra protagonista “escupió” a Monseñor García Benítez cuando al exponer su obra La adolescencia en el Museo de Zea en Medellín, García Benítez le advirtió de excomunión
Monseñor García le llamó a su despacho para prohibirle que pintara más desnudos. Débora le contestó que, si había llamado ya a Pedro Nel Gómez, que también pintaba desnudos. Monseñor lo justificó por ser hombre a lo que la artista le contestó tan magistral frase.