En casi todos los estilos musicales, incluyendo los del metal, es muy difícil establecer quién o quienes los crearon. El black metal es una excepción, ya que su creador fue el cantante y músico sueco Tomas Forsberg “Quorthon” cuando formó un proyecto llamado BATHORY con el que, basándose en el speed metal de grupos como los británicos VENOM y en el thrash metal de bandas como los alemanes SODOM, dio origen a mediados de los 80 a un nuevo género de metal extremo .
Éste se caracteriza por ritmos muy rápidos; melodías y estructuras de canciones inusuales y poco convencionales con partes instrumentales largas y repetitivas y ausencia de estribillos, atmósferas oscuras y épicas gracias al uso de disonancias y del tritono. Un sonido muy crudo a base de guitarras muy distorsionadas y agudas, el uso casi constante del llamado “blast beat” (ritmo de batería muy veloz y agresivo gracias a la utilización del doble bombo o doble pedal) y un tipo de voz agudo pero a la vez muy desgarrado.
Además esta crudeza se vio aumentada por una producción de baja fidelidad, lo que le daba al sonido una “autenticidad” que han buscado posteriormente muchos músicos del estilo, llamado black metal (metal negro) por el título del disco más famoso de VENOM.