Es con gran alegría que vuelvo a encaminarme al centro de Málaga para asistir a la primera Goetia Session en casi dos años. Volvemos a la Velvet, en su ubicación actual, nunca había estado desde su reapertura, y me ha sorprendido el tamaño del local, que esperaba más chico, y nada más lejos de la realidad. Una sala amplia donde se puede ver casi desde cualquier punto el escenario.
Saludo a los viejos conocidos, y ya me anuncia Jorge Fretes que se va a colgar el cartel de “No hay billetes”, y es con gran alegría que presenciamos un concierto donde no cabe ni un alfiler.