Crónica: IV CACHOPO FEST – MIND DRILLER + TOOTH UNLABELED SOCIETY + BLEEDING ROCK – Sevilla. 27-4-24. Sala X.

Ya me tocaba asistir a mi primer Cachopo Fest que a primera vista tenía buena pinta por lo variada de la oferta y por supuesto por la calidad ya conocida de cada una de las bandas.

BLEEDING ROCK

Losa que se encargaron de abrir, a las 21:00 de la noche fueron los “nazarenos”, BLEEDING ROCK, que con su poderoso rock del “de toda la vida”, hicieron vibrar a toda la sala desde el primer acorde, el cual sonó con el título de You Can´T See Me. Tema tras tema, Different Mind of Men, I´m Guilty, se ganaron al público y es que, quién no sienta algo por dentro con sonidos que te traen a la memoria reminiscencias de nombres como CHUCK BERRY, STEPPENWOLF, THE ALLMAN BROTHERS BAND, JEFFERSON AIRPLANE,  etc, etc, es porque no tiene nada en las venas.

Sólo queda morder, único tema en castellano del repertorio de la noche, llegaba en el ecuador de la actuación, que iba desarrollándose de manera intensa y rabiosamente rockera. Tras dos temas My Medicine y Lucky Man, que inevitablemente me recuerdan, en la primera por la voz, a BLACK LABEL SOCIETY y en la segunda a unos ZZ TOP o THE BLACK CROWES, por nombrar algunos.

Por cierto, no sé si soy el único que piensa que un piano les vendría a las mil maravillas aunque fuese en momentos puntuales, ya que al cabalgar entre ese rock clásico y esos ramalazos stoner que se gastan a menudo, perderían esa versatilidad…

Acercándose al final de su actuación nos obsequiaron con una versión de War Pigs de BLACK SABBATH que les quedó realmente bien y para terminar, qué mejor manera que hacerlo con la canción The End con la que definitivamente me reafirmaron que a quién más me recordaban era a los griegos STONE CREAM.

Gran actuación para abrirles el camino a las bandas que venían detrás, por parte de BLEEDING ROCK, que con un estilo tan pegajoso (en el buen sentido) y practicándolo de forma tan natural, con esa solvencia y calidad, están llamados a ser un referente en este país (en el caso de que este país fuera normal en lo musical, claro).

TOOTH UNLABELED SOCIETY

La segunda banda del cartel, TOOTH UNLABELED SOCIETY, también venía de Sevilla, pero de la capital. Como decía al principio, el estilo musical variaba 180º respecto a los demás, y su apuesta, en lo personal, se me hacía muy atractiva.

Al verlos en el escenario imagino que a más de uno le sorprendió el hecho de ver a cinco y no a cuatro componentes, sumándose un guitarrista más. Pero no, pronto salimos de dudas al comprobar que sólo se trataba de prestar su apoyo como rítmica en el primer tema del repertorio, The Realm Of Ignorance.

También, aparecieron con unas máscaras los guitarras y el bajista, de las que se desprendieron tras dicha canción.

El segundo tema de su actuación es el que lleva por título Shores of Rubicon, con el cual, Kris, su cantante, debe venir con los deberes hechos en lo referente al calentamiento de la voz, pues no creo que sea nada fácil entrar casi al principio con esa parte tan melódica y cambiar de momento para desgañitarse guturalmente. Pero no quedó ahí la cosa pues con Through the Storm se complicaba la apuesta de Kris y a la vez me percato de la magnífica labor de los tres músicos de la banda. La complejidad de unas composiciones cargadas de detalles a la batería, en la que el jovencísimo Samuel se está haciendo con un nombre en la escena sevillana, y el virtuosismo de Pepe a las guitarras y la solidez y perfecta sincronía de Nacho al bajo, conforman una oferta musical que estaba huérfana en Sevilla pero que tampoco abunda en el resto del territorio nacional.

En lo musical todo va rodado, pero no tanto así en el aspecto “rítmico” del concierto, y es que, entre un tema y otro, el tiempo, sin ser muy señalado, es lo suficientemente espeso como para cortar el tempo de una actuación fluida.

Lullaby marca la mitad de la actuación y después de Cursed, con una bonita intro a guitarra acústica (de esas hechas con gusto y sentido), suena, quizás, el tema del disco en el que creo que aúnan todas y cada una de las peculiaridades, influencias y características que hacen distinta y especial a esta banda, Orphan.

Como colofón a su actuación, Beneath the Shadows of Filth” es el tema elegido, sellando con un órdago su presencia en el escenario después de tener que acortar (al menos en un tema) su show.

MIND DRILLER

Tras un breve descanso para retoque técnico en escena y aprovechar parte del público para tomar el aire hacían acto de presencia los cabezas de cartel.

Llegados desde Alicante, los metaleros industriales MIND DRILLER se hacían notar desde el primer segundo con su magnífica puesta en escena. Escena que se les quedaba pequeña, no ya por el número de componentes sino por la disposición de estos en el escenario, con una primera línea de cinco con el batería únicamente detrás.

De primeras, para quién se encontrara de primeras con el grupo, seguramente le resultaría extraño, cuanto menos, ver que hay el mismo número de vocalistas que de músicos; tres.

Pero con toda justicia diré que las tres voces están más que justificadas en el engranaje del grupo. Las tres tienen el mismo protagonismo e importancia. Las tres están donde tienen que estar y eso sólo puede lograrse tras un trabajo descomunal de composición y de darle una y mil vueltas a las ideas para plasmarlas en canciones redondas.

Y quizás, en referencia a esto de las voces, la de Estefanía sea la que más espectro cubra, ya que si bien entre V y Dani se intercambiaban los momentos entre gutural, graves y agudos, ella tenía la doble labor de utilizar su timbre de voz “natural” y además, hacerlo de forma gutural, logrando de esta forma más color y más registros en ese aspecto.

Además del astronauta (Dani) que salió al principio apuntando con una linterna, acojonando al personal, no dejan nada al azar. Las vestimentas, todas en blanco con leves detalles en negro, maquillaje y diversa parafernalia a modo de máscaras para los tres músicos, hacen que el espectáculo no decaiga, provocando que no quieras perderte nada de lo que sucede sobre las tablas.

Y en lo musical, pues metal industrial de claras influencias Rammstenianas, con pasajes en las letras en alemán (por parte de Dani N.Q.), que hacían más evidentes esas influencias y una constante que sí se me hizo un tanto repetitivo, como era ese ritmo tan reconocible que cualquier metalero relaciona con lo que se dio a conocer en aquellos primeros años 90, como la “Ruta del bacalao”.

Su actuación estuvo centrada sobre todo en su disco The Void, editado este mismo año, del que sonaron algunos temas como Armour, The Fallout (que cerró la actuación), A.I., Happy hunting, End of the World o Game Over, que fue la elegida para abrir, mientras que de su álbum de 2019, Involution sonaron M4N1KÍ, Calling at the Stars y Rotten.

En definitiva, MIND DRILLER tiene un futuro prometedor por delante (eso sería lo lógico y justo) porque lo que hace en directo lo hace escandalosamente bien y porque sobre todo, si esa disciplina de trabajo, (que sus miembros deben de tener seguro), la mantiene tal cual (y no dudo de que así sea porque lo disfrutan al 100%), les va a dar sus frutos sí o sí.

Por cierto, no quiero ni pensar la que liarían esta gente en el festival ese cutre de EuroRisión. Ganar no sé si ganarían, porque ya sabemos lo que hay, pero que iban a reventar cabezas y prejuicios ya os digo yo que a tutiplén.

Y una cosa más. Este estilo a mí no me termina de convencer. Si con esto último que he dicho no te pica la curiosidad de darles una escucha en caso de no conocerlos, es que no tienes la más absoluta motivación por la música.

Bravo por MIND DRILLER.