Tras el éxito de Glare of Deliverance, GENUS ORDINIS DEI anuncia The Beginning, nuevo disco en forma de serie musical que saldrá a la venta el 8 de diciembre de 2023 a través de Eclipse Records.
Tras el éxito de Glare of Deliverance, GENUS ORDINIS DEI anuncia The Beginning, nuevo disco en forma de serie musical que saldrá a la venta el 8 de diciembre de 2023 a través de Eclipse Records.
El álbum fue producido, grabado, mezclado y masterizado por Tommaso Monticelli en Sonitus Studio en Crema, Italia. La serie de vídeos fue dirigida por GENUS ORDINIS DEI y filmada por Steve Saints.
The Beginning es el cuarto álbum de estudio de la banda de death metal sinfónico GENUS ORDINIS DEI, que redefine la forma en que escuchamos música. En términos más sencillos, el producto final es un excepcional álbum de doce pistas y un impresionante conjunto de vídeos representativos llamados “Episodes”, que abordan directamente la forma en que utilizamos nuestros sentidos. Con The Beginning, La banda nos muestra con toda claridad que la brutalidad es la savia de la sociedad, como seguimos engañándonos irónicamente con construcciones sociales cuidadosamente elaboradas. The Beginning no es sólo música, es una experiencia, un amanecer rojo, un despertar.
El primer capitulo, Changing Star, presenta a un hermano y una hermana en los albores de la humanidad, navegando por un hermoso y brutal desierto marcado por el canibalismo y el salvajismo. Los magníficos planos generales y los primeros planos a cámara lenta del vídeo son impresionantes, mientras que musicalmente, se nos ofrece el comienzo de una sinfonía épica de metal con una mezcla elaborada de gruñidos y voces limpias.
“Decidimos rodar el vídeo de esta canción después de escuchar la hermosa melodía del estribillo del tema y la gran sensación de viaje que te transmite el tema. Buscábamos una canción que representara a la perfección el primer episodio de la serie y Changing Star era perfecta”, dice el vocalista y guitarrista Nick K. El guitarrista y productor Tommy Monticelli continúa: “El vídeo se rodó en muchas localizaciones y viajar con el equipo durante todos estos kilómetros fue una auténtica aventura. En particular, rodar la escena del canibalismo fue una mezcla de emociones y sensaciones fuertes. Rociamos literalmente toda la montaña con sangre falsa, y aún nos preguntamos cómo la comunidad local, una vez allí, no empezó a perseguir a un asesino en serie. (risas). Luego, la experiencia en el paso de Pordoi, a 3000 metros, rodando escenas semidesnudos en este paisaje lunar fue como vivir un sueño absurdo. Por suerte para nosotros encontramos días templados y soleados, de lo contrario habríamos sufrido las penas del infierno por el frío. La Providencia besa a los audaces”.