Hay discos que resultan mucho más fáciles de escuchar que otros. De hecho hay algunos que directamente en la primera escucha ya se sabe qué se va a encontrar uno, y por ello no les da más importancia. Y por otro lado están esos trabajos que parece que son de estos últimos, pero luego les das otra oportunidad y te acaban sorprendiendo.
Quizás es el caso de esta semana, MOORAH y su último trabajo: Marnost Nad Marnost. Un trabajo que quizás yo lo encararía en un estilo más tirando a depressive suicidal black metal, que al black metal clásico.