El Covid19, la pandemia significativa del primer cuarto del S. XXI afectó al mundo en cualquiera de sus ámbitos. Fuera social, gubernamental, musical… La escena cultural mundial tiembla y el heavy metal no es una excepción. Sin embargo, la destrucción es otra forma de generar y propiciar un cambio en el orden y el caos universal. Brotes verdes nacen del desastre y entre ellos, una semilla llamada THRASHWALL comienza a desarrollarse en Portugal. Un quinteto de thrashers deciden pelear contra el Covid19 y plantarle cara al SARS-CoV2. ¿Cuál ha sido el resultado? Un disco que destruye al Coronavirus a base de thrash directo de la antigua escuela. ¡Qué pena gastarse tanto dinero en mascarillas y geles alcohólicos cuando la cura de la pandemia se halla en 30 minutos que revientan al virus allá donde esté! Oxford, Moderna, Pfizer… A ver si aprendéis a investigar más al thrash metal y menos combatir entre vosotros por la carrera vacunal.
De por sí, el tema introductorio nos sumerge en una utopía futurista, similar a la saga cinemática Terminator, donde la ambientación y simples pero potentes toques de galopes instrumentales terminan en una ansiedad palpable. Sin embargo, esto sólo es el principio, pues el tema War Outside the Wall da sus primeros riffs al instante. Nos invade la velocidad, la precisión rítmica, el tempo colérico y las numerosas estructuras musicales combinadas de voces furiosas y coros constantes. Un comienzo tan brutal y bestial, lo cual se agradece muchísimo, no es característico en estos tiempos modernos donde la música de cristal se agrieta ante el más mínimo roce.