Surgido en Estados Unidos a mediados de los 80, en principio es la versión metalera del rock alternativo, como el propio término indica. Pero ha acabado englobando cualquier mezcla de metal, del estilo que sea, con géneros que normalmente no son asociados al mismo como el rap y el funk. De hecho ha dado lugar a varios subgéneros como el rap metal, el funk metal y el nu metal.
El metal alternativo propiamente dicho se caracteriza musicalmente hablando por incorporar sonidos inusuales y poco convencionales dentro del metal, ritmos más lentos y melódicos de lo habitual en este, una afinación baja de guitarras y bajos, riffs de guitarra repetitivos y a medio ritmo y voces por lo general limpias y melódicas influenciadas por el rock alternativo.
En cuanto a las letras, al igual que ocurre con las del rock alternativo, tienen una temática muy variada y en contra de lo acostumbrado en el metal predominan los temas intimistas y personales, algunas veces llegando a ser surrealistas. Pero también las hay de crítica a la sociedad y al sistema establecido como es común en muchos grupos de heavy y de algunos de sus subgéneros.