Crónica: JOSE RUBIO Y G3NOMA – Cuando en la noche las guitarras cantan

La noche del viernes 9 de febrero se llenó de rock, con dos estilos diferentes de ejecución que nos hicieron vibrar. Uno nos habló con palabras y sentimientos, el otro nos cantó entre cuerdas, madera y metal. Ambos nos mostraron su talento y maestría, los dos nos hicieron soñar.

Así, el pasado nueve de febrero, nos desplazamos hacia el barrio rockero de ‘Vallekas’ en Madrid. La cita sería en la sala The Godfather Rock Bar, allí nos reunimos para disfrutar de la música del guitarrista JOSE RUBIO, un músico con una amplia trayectoria. Recordado artista por su paso en grupos como WARCRY, TRILOGY, URÓBOROS y MEGARA. En esta ocasión, llega a Madrid para presentarnos en directo su último trabajo en solitario Black Rose, un disco instrumental que combina el metal, el progresivo y la música celta. A pesar de la fría noche del viernes, The Godfather Rock Bar registró una entrada importante, el rock nos dio calor, ritmo y pasión.

G3ENOMA

Pero esa noche, fue también una noche de descubrimientos musicales, y sobre el escenario tendríamos el placer de escuchar a G3NOMA. Una banda que nos enseñó su sonido con claras influencias de metal y rock melódico. Compuesta por Alberto (voz), Raúl y Sam (guitarras), Iván (bajo) y Diego (batería), venía presentando su álbum debut, Existencialismo. Un disco con canciones que trasmiten un abanico de situaciones, y emociones, que llaman a la reflexión. Canciones como Volver a soñar, Ilusiones y Circo de locos nos emocionaron.

Con Despertar, una preciosa balada, el grupo nos invitó a cantar con ellos. Y si hablamos de cantar, genial quedó 10 años, tema que popularizara la banda madrileña SÔBER, que en manos de G3NOMA fue una versión muy particular. Lo que queda claro es que G3NOMA hizo muy buen trabajo, dejando al público muy satisfecho, llevándose un gran recuerdo de su actuación, y quizás de paso el disco, que esa noche estuvo a la venta en un improvisado stand de merchand.

JOSE RUBIO

Tras un breve descanso, sonó Gates of Babylon de RAIMBOW. ¿Qué mejor canción para ser usada como previa a la actuación de cabecera de la noche? Era el turno del show de JOSE RUBIO, que nos ofrecería un espectáculo de virtuosismo y creatividad. El músico estuvo acompañado por grandes artistas, dos en particular, a pesar de no tener años de experiencia, si demostraron tener un gran talento, a pesar de la juventud y nada tienen que envidiar de las grandes figuras. Hablamos de los hijos de JOSE RUBIO, Galilea Rubio al mando del bajo y Jose Rubio JR, con tan solo once años, al frente de la batería. No quisiera olvidarme de la gran labor que hizo Robert Beade, a la segunda guitarra, dando soporte a cada uno de los temas.

Juntos repasaron los temas del nuevo disco, Black Rose, además de echar una mirada atrás a antiguos trabajos. Así pudimos volver a disfrutar del Samhain, y celebrar el final de temporada de cosechas en la mitología celta, bailamos con The Rampages of Robin Redcap, y escuchar de nuevo Kelpie Song, todas ellas del álbum Celtic Land, que le sirvió de presentación a los siguientes temas. Una por una, fueron sonando las canciones de Black Rose. JOSE RUBIO, fue presentando cada canción, al ser en su totalidad un show instrumental, algo que hizo que el concierto fuera más ameno, y se disfrutara doblemente. The Crow, como explicó, se inspira en el famoso poema de Edgard Allan Poe, y sonó potente, a cada nota que arrancaba de la guitarra podías escuchar el ‘… never more’ desde sus cuerdas. The Jacket Over the Grave nos hizo recordar a Irlanda, por una clara influencia al sonido de GARY MOORE, canción que sirvió de homenaje al famoso guitarrista irlandés. Y si de influencias hablamos, dos fueron las versiones que escuchamos, Coast to Coast de SCORPIONS y Into To Arena de MICHAEL schenker. Podemos destacar algo que podría ser puramente anecdótico es noche, fuimos testigo del talento de Jose Rubio JR, su hijo, quien protagonizó un increíble solo de batería que dejo con la boca abierta a todo el mundo, ese solo fue improvisado, ya que fue provocado por una pausa debido a un problema técnico de su hermana Galilea Rubio con las cuerdas de su bajo. Agradecimiento a G3NOMA por ceder el suyo temporalmente.

Con unas dos horas aproximadamente de duración, el concierto terminó con una ovación por parte de los asistentes, y con el agradecimiento de las bandas por la asistencia al espectáculo. Todos sabemos lo difícil que es hoy en día ver música en directo, y más si es un concierto instrumental, sabiendo que a mucha gente puede resultarle difícil de entender, pero, aun así, el apoyo por parte del público esa noche fue sobresaliente.

A veces, se agradece el poder disfrutar de conciertos de ese estilo, donde por una parte descubres bandas como G3NOMA, con las que te quedas con ganas de escuchar más. Y, por otra parte, disfrutar de JOSE RUBIO y su música y de una buena guitarra, y que sus ritmos y melodías arrancadas desde sus cuerdas te haga viajar.