Como el propio término indica es una mezcla de ambos estilos, surgido en el centro y el norte de Europa y en Norteamérica a comienzos de los 90, cuando una serie de bandas, muchas de las cuales habían empezado haciendo uno de los dos en exclusiva, decidieron combinar dos de los géneros más extremos que existen, aunque también han aparecido grupos como los suecos DISSECTION y los taiwaneses CHTHONIC que mezclan las versiones melódicas de los mismos. Y otros que hacen justo lo contrario como los estadounidenses ANGELCORPSE o los mexicanos TÁNATOS.
Dependiendo de las bandas, de los discos e incluso de las canciones, predominan los elementos de uno u otro estilo, pero en general se puede decir que del black metal adoptan las atmósferas oscuras, tenebrosas y épicas y el sonido crudo de las guitarras, con una alta distorsión; del death los riffs y solos de guitarra y los tonos graves; y de ambos la potencia y la velocidad conseguidas principalmente gracias al uso del “blast beat”, ritmo de batería a base de doble pedal o doble bombo característico del metal extremo en general. En lo referente al tipo de voz hay cantantes que usan la gutural propia del death y otros que utilizan la aguda y desgarrada típica del black. Y algunos como el de los austriacos BELPHEGOR mezclan ambas.